El Gobierno prometió investigar lo revelado por Amnistía Internacional (AI) de que la periodista Nuria Piera fue víctima de espionaje entre los años 2020 y 2021 a través del software Pegasus, aunque adelanta que no tiene ningún acuerdo de prestación de servicios con la empresa israelí creadora de ese programa de vigilancia telefónica.
Una vez infecta el teléfono de la persona objeto de vigilancia, Pegasus transporta datos del usuario, como correos electrónicos, mensajería y fotografías, hacia páginas de internet también creadas por la compañía NSO Group, que renueva constantemente para evitar ser detectadas.
Ese dispositivo, capaz de leer mensajes y correos de las víctimas, escuchar sus llamadas, tomar captura de pantalla, acceder a sus contactos y a su historial de navegación, ha sido usado con mucha profusión en tareas de espionaje contra políticos, empresarios y periodistas en muchos países.
Una investigación reveló que comunicadores, activistas y jefes de Estado son o fueron vigilados a través de Pegasus, un software creado inicialmente para combatir el crimen y el terrorismo, pero que devino en un instrumento de espionaje a nivel mundial, con más de 50 mil teléfonos objetos de vigilancia. Nuria Piera figura entre más de 180 periodistas a nivel mundial, de medios como The New York Times, Al Jazeera y France 24, espiados con ese software, según pudo comprobar Amnistía Internacional y otras organizaciones participantes en una investigación que incluyó la revisión de los teléfonos de las víctimas.
El Gobierno está compelido a realizar una pesquisa tan extensa y profunda como sea posible a los fines de determinar si además de Piera, otros periodistas, políticos, empresarios o funcionarios públicos dominicanos han sido objeto de espionaje por vía de ese programa.
La ocasión puede ser propicia para que también se investigue si agencias oficiales vinculadas con espionaje o vigilancia, o empresas privadas que fisgonean por encargo, se han pasado de la raya en violar derechos ciudadanos a la intimidad o al libre ejercicio profesional.
Si las autoridades toman en serio lo relacionado con Pegasus e investigan el oscuro mundo del espionaje en República Dominicana, es posible que aquí se reediten escándalos tan grandes como los que han aflorado en otras partes del mundo.